EN ESTE SUCEDER EL TIEMPO
En este suceder el tiempo
mi haber octosilábico
no convoca más palabras;
me basta ver la vasta llanura mesetaria
para saber del espíritu que anida
tu corazón enamorado, Sevilla.
Brotes de ilusión aneja a ti, España,
resaltan un sentido pendentista
donde ayer Gaudí creará la Sagrada Familia
y hoy doblan algunas campanadas…
¡La olimpiada está servida!
El mundo –España en él comprendida-
apuesta en la ruleta de la vida
por el alma de las cosas
que dicen rozar la cultura…
¡Si acaso arriesgaran por el alma misma!