SI DEL MANANTIAL GERMINARA
Si del manantial germinara
dando brillo a tu pupila,
y en sonrojada mejilla
vertida del lacrimal,
bogara una lágrima viva...
Por culpa del verbo amar…
Dime:
de ti, ¿Qué he de esperar?
Si al colgar tu inocente mano
en el hombro del silencio,
adviertes el desnudo recio del ser
que tanto te ha amado…
Queriéndote de él escapar,
Dime:
¿Arrojarías en él tu desprecio
por tan sublime pasión?
¿O acaso tu corazón
no admite tales tormentos?
Hablemos sin cesar
sabiendo cómo, dónde y cuándo callar.
Hablemos de amor, de dar,
no de prestar,
de beber del mismo vaso
de comer del mismo pan;
y expresemos la palabra olvido
sin que haya, por ello, que olvidar.
¿Qué más puede pedir el hombre
aparte de hablar por hablar?